Los liftings faciales son quizá uno de los tratamientos de cirugía estética más populares. Su objetivo es reducir los efectos de la edad sobre la piel.
Hay muchas variaciones en este procedimiento de cirugía estética. Se diferencian por el tipo de incisión, la zona facial afectada, el nivel de invasividad:
-Lifting facial con cicatriz pequeña: Este tipo de lifting está recomendado para personas menores de cuarenta años que tengan una flacidez mínima en la piel o para las personas que quieren reducir al mínimo el tamaño de sus cicatrices. Para este procedimiento sólo es necesaria una pequeña incisión que no se extiende hasta detrás de las orejas como en el caso de los liftings faciales tradicionales. Con este procedimiento el paciente sufrirá una menor inflamación, una menor aparición de moretones y un periodo de recuperación más corto respecto a otros tratamientos más invasivos. Es posible que este tratamiento no sea capaz por él mismo de levantar la piel más caída de la parte inferior del rostro y del cuello.
-Lifting facial endoscópico: Este tipo de lifting también está pensado para los más jóvenes con menos flacidez. Para llevar a cabo este procedimiento se utiliza un endoscopio y se realizan unas incisiones muy pequeñas, lo que comporta un menor riesgo de daño a los nervios, de aparición de moretones y de sangrado. Además, se puede realizar como un procedimiento ambulatorio. El lifting facial endoscópico no es eficaz para las personas que tienen el cuello descolgado, es sólo eficaz para aquellas que tienen flacidez en las mejillas.
-Medio lifting facial: En este tipo de lifting se realiza una pequeña incisión dentro de la boca y en el nacimiento del cabello para elevar el tejido graso a través de los huesos de los pómulos. Este tratamiento es útil para borrar las líneas de expresión de la sonrisa y para realzar las mejillas hundidas. Este procedimiento proporciona unos resultados más sutiles y su público objetivo son las personas entre cuarenta y cincuenta años.
-Lifting tensor: Este tipo de lifting se considera no-quirúrgico. Se hacen unos diminutos ganchos con el hilo de las suturas. Estos pequeños ganchos sujetan la piel hacia arriba y la tensan. El hilo de la sutura debe permanecer en el mismo lugar, con tal de conseguir el efecto de lifting facial permanente. En este procedimiento no se realizan incisiones, no hay periodo de recuperación y el lifting con hilos tensores se realiza bajo anestesia local. Este tipo de lifting está dirigido para gente entre 30 y 40 años que tienen muy poca flacidez.
-Lifting SMAS: Entre los liftings tradicionales, encontramos el lifting del sistema musculoaponeurótico superficial (SMAS) que sólo afecta a las capas superficiales de la piel y a los tejidos más profundos de la cara y del cuello. Está considerado como el lifting facial por excelencia por su seguridad y se eficacia en la corrección de la flacidez de la piel y de las arrugas faciales profundos. En este lifting facial, el cirujano hace una incisión en la sien (por encima del nacimiento del cabello) extendiéndola hacia abajo a lo largo de las arrugas de la piel. Más tarde, el cirujano eleva la piel, elimina el exceso de la misma y la fija en el lugar deseado con puntos de sutura. En este tipo de lifting, el proceso es más largo que en los de los liftings antes mencionados, requiere un mayor período de recuperación, pero al mismo tiempo, es más eficaz para pacientes mayores de 45 años con mayor laxitud y flacidez en el cuello y en la papada. Los efectos también son más duraderos que en los otros procesos.
-Lifting plano en profundidad: Este lifting es más profundo que el SMAS. Para llevar a cabo el procedimiento el cirujano debe hacer una incisión a lo largo del nacimiento del cabello. Este lifting es más extenso que el lifting SMAS y está dirigido a personas mayores con flacidez y laxitud facial grave. Este lifting dura mucho tiempo y proporciona unos efectos espectaculares.
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