El agrandamiento del pecho masculino, ya sea en uno o ambos pechos, puede resultar en problemas de autoestima que pueden conducir al uso de camisas y suéteres anchos y gruesos y a evitar actividades deportivas que puedan revelar esta condición a los demás.
Esto especialmente puede tener lugar en varones adolescentes, que pueden ser objeto de las burlas de sus compañeros y por lo tanto pueden experimentar un trauma social.
Sin embargo, no se trata de una condición inusual ya que está presente entre un 40 y 60 por ciento de la población masculina.
Las causas de quererse someter a una operación de ginecomastia pueden ser diversas y en un número significativo de los casos las causas son desconocidas. Sin embargo, entre los factores que contribuyen al agrandamiento de los pechos podemos incluir el uso de esteroides, la ingesta de medicamentos que contienen estrógenos, el alcohol, los desequilibrios hormonales y los factores hereditarios. Los resultados son el aumento de la grasa y del tejido glandular de los senos que no se pueden tratar con ninguna dieta o ejercicio. En algunos casos, el ejercicio puede incluso hacer que este problema sea más notable.
Los candidatos para someterse a una reducción de pecho masculina
Es necesaria una primera visita con un cirujano plástico cualificado para determinar si este procedimiento es adecuado para tu caso en particular. Los candidatos ideales para someterse a la cirugía son aquellos que tienen una piel firme y elástica con la finalidad de permitir la efectiva reconfiguración de los contornos corporales.
La cirugía de la reducción de pecho masculina se debe realizar cuando el paciente ha pasado ya la pubertad y se encuentra en plena madurez tanto física como emocional. Esto también permitirá la posibilidad de que la condición pueda corregirse por sí misma. En algunos casos esta corrección ha tenido lugar cuando el paciente ha cumplido 18 o 19 años. En los casos que el paciente tenga un trauma emocional grave, la cirugía se adelantará en el tiempo. En todos los casos con adolescentes, el paciente y sus padres deben hablar con el cirujano plástico para informarse y así poder tomar una decisión.
El procedimiento depende de la cantidad de la reducción de pecho masculina necesaria. En algunos casos, se le puede indicar al paciente que se someta a una liposucción y en otros, es necesaria la extirpación quirúrgica del exceso de grasa, tejido glandular y piel. El procedimiento es similar a una reducción del pecho femenina, se realiza con anestesia local o general y dura entre tres y cuatro horas. La ginecomastia masculina, se realiza generalmente de forma ambulatoria.
La liposucción se utiliza en los casos en que la causa de la ginecomastia son simplemente unos depósitos de grasa en la zona pectoral en lugar de exceso de piel y tejido glandular. En el procedimiento de la liposucción, se hacen una pequeñas incisiones cerca del pezón y el exceso de grasa se succiona a través de un tubo delgado y hueco llamado cánula. Los resultados, aunque sean permanentes, pueden ser menos evidentes si el paciente se engorda posteriormente.
En caso de que se deba eliminar quirúrgicamente el tejido glandular, se deberá hacer una incisión en el borde inferior de la areola y se eliminará la masa glandular a través de ella. Esta zona puede ser posteriormente contorneada con la ayuda de una liposucción.
En raros casos en que el exceso de piel también se necesite eliminar, se realizarán unas incisiones por debajo y alrededor de la areola, como se haría en una reducción o levantamiento de senos de una mujer. Las incisiones se deberán coser con puntos de sutura y se aplicarán unas vendas para proteger la zona.
Es aconsejable que el paciente tenga a alguien que lo lleve a casa después de la cirugía de la reducción de pecho masculina, debido a los efectos de la anestesia. El tiempo de inactividad se limita dependiendo del procedimiento y el paciente, en general, podrá volver al trabajo al cabo de una semana, siempre que la actividad laboral no sea extenuante. El paciente sentirá un poco de dolor, es normal que aparezcan moretones e inflamación en la zona. El médico por lo general recetará una serie de medicamentos para contrarrestar el dolor.
El médico aconsejará al paciente que lleve una prenda elástica de presión entre tres y seis semanas con el fin de ayudar al proceso de curación. El paciente no debería exponer a la luz solar la zona pectoral hasta que no hayan pasado al menos seis meses desde de la cirugía. El paciente podrá disfrutar de un pecho más firme y contorneado cuando pueda comenzar a practicar ejercicios.
Las complicaciones y los efectos secundarios de la cirugía de la reducción de pecho masculina son poco frecuentes. Entre ellas podemos incluir una reacción adversa a la anestesia, sangrado, infección y acumulación excesiva de líquido debajo de la piel. El grado de cicatrización depende del procedimiento, pero generalmente es mínima. También podemos encontrar resultados insatisfactorios relacionados con la asimetría de tamaño de los senos y la colocación de los pezones.
En algunos casos, se deberá llevar a cabo una cirugía adicional para corregir dichas asimetrías. Lo más importante a destacar, es que a pesar de que las complicaciones son relativamente poco frecuentes, las posibilidades de las mismas las deberías examinar en detalle con tu médico antes de la cirugía.