Sin embargo, una de las formas de bajar de peso que ha adquirido mucha popularidad en los últimos años son las inyecciones o la famosa mesoterapia.
En palabras sencillas la mesoterapia consiste en inyectar cierto tipo de sustancias que al ingresar en nuestro organismo atacan las células de grasa. Estas sustancias se preparan a base de productos alopáticos y homeopáticos, además de varias vitaminas y aminoácidos.
Cada médico emplea diferentes compuestos y elige la combinación que resulte la más adecuada para ellos, por lo tanto no se puede definir exactamente que compuestos forman parte de la mezcla.
El nombre de ésta alternativa para la obesidad proviene de una de las capas de la piel: el mesodermo que es en donde se realizan las infiltraciones.
Algunos de los beneficios de la mesoterapia son: que aunque su principal enfoque es atacar directamente a las áreas donde se deposita la grasa, ésta mejora notoriamente los muslos, las caderas, los glúteos y el abdomen.
Además repercute positivamente en la circulación sanguínea y linfática, por lo tanto corrige problemas de inflamación en articulaciones, es por eso que la gente hoy en día busca como una opción para reducir tallas las inyecciones para quemar grasa.
De ésta manera funciona la mesoterapia: La grasa se transporta a través de nuestro organismo por medio del torrente sanguíneo, cuando se topa con los compuestos de la sustancia inyectada, es redireccionada hacia los riñones donde es eliminada por la orina.
Una de las ventajas de la mesoterapia es que es un procedimiento no invasor o sea que no necesita incisiones o cortes en la piel y por lo tanto no necesita anestesia ni un largo tiempo de recuperación.
Esto hace que se eliminen los riesgos asociados con otros procedimientos de cirugía plástica.
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