Muchos consideran que la primavera es la época perfecta para comenzar un tratamiento de fotodepilación,
Con la piel más blanca, los resultados serán más seguros y eficaces, y se puede realizar el tratamiento sin prisas a lo largo de todo el año, olvidándose del resto de métodos depilatorios de forma permanente.
justo antes de lucir el cuerpo en verano. Pero durante esos meses los rayos solares comienzan a asomar y a estar presentes en la piel, nada bueno para las sesiones con láser y la salud. Siempre que se sigan los cuidados necesarios recomendados por los especialistas no habrá problema pero, para evitar riesgos, el otoño, ideal para iniciar depilación láser.
Los excesos del sol durante los meses de verano dejan huella en nuestra piel y es en otoño cuando se suele tomar conciencia de ello. Pues bien, también es tiempo para ponerse manos a la obra y mejorar el aspecto a través de tratamientos como la fotodepilación, que requieren protección solar, y de este modo se podrá disfrutar del buen tiempo llegado el momento sin preocuparse.
Aprovecha la vuelta de las vacaciones y el otoño, ideal para iniciar la fotodepilación o depilación láser, por estética y por salud:
a. Porque todo el mundo desea tener una piel suave y sin vello de forma permanente. Y tras el verano uno se da cuenta de la pérdida de tiempo, dinero e higiene que producen otro tipo de técnicas depilatorias, sin poder haber estado a gusto con el cuerpo en ese tiempo de ocio y descanso.
b. Y por otro lado está la salud. Preocupados cada segundo de cuándo es el momento preciso para depilarse, antes y/o después del sol, y en muchos casos, aún así, provocando problemas en la piel, por los rayos solares, el calor o un mal uso de los métodos depilatorios, como manchas o la odiada foliculitis.
Después de haber decidido acudir a nuestro centro médico estético especializado en depilación láser y haber optado por el tipo de tratamiento más apropiado a la piel y el vello de cada uno, los expertos sanitarios aconsejarán los pasos a seguir durante las sesiones. Pero quizá la recomendación más esencial sea evitar estar bronceado antes del láser, y comenzar el tratamiento cerca de un mes y medio después de haberse expuesto a los rayos solares. El motivo es que el láser funciona mejor cuanto más clara sea la piel y más oscuro sea el pelo para hacer contraste; si la piel está morena, el láser será menos efectivo y los resultados serán peores.
Además de los riesgos ante los que puede estar expuesto el cuerpo ya que la piel bronceada tiene un extra de melanina que atrae al láser y, de este modo, podría quemarse con más facilidad. Otro motivo para no estar morenas al acudir a la sesión y elegir el otoño, ideal para iniciar la fotodepilación.